Remedios caseros para el vértigo
El vértigo es una especie de mareo caracterizado por la sensación de que usted o su entorno se están moviendo, girando, cayendo o inclinándose, aunque no hay movimiento real.
Puede ir acompañado de otros síntomas como náuseas, vómitos, pérdida de equilibrio, tinnitus, pérdida temporal de la audición o sensación de plenitud en el oído.
El vértigo en sí es más un síntoma que una enfermedad y es diferente del mareo o vértigo inespecífico.
La forma más común de vértigo es el vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), causado por una alteración en las partículas de calcio llamadas otolitos en los canales semicirculares del laberinto del oído interno. Las personas mayores son más propensas a este problema.
Se caracteriza por una sensación de movimiento, provocada o empeorada por movimientos repentinos de la cabeza o cambios de posición. Por lo general, dura menos de un minuto.
Algunas otras condiciones que pueden conducir al vértigo son laberintitis (inflamación de la estructura del oído interno llamada laberinto), enfermedad de Meniere, neuronitis vestibular (inflamación del nervio vestibular generalmente causada por una infección del oído viral), lesión en la cabeza y migrañas.
También puede ser debido a problemas en el cerebro o los nervios o un efecto secundario de ciertos medicamentos.
En algunos casos, el vértigo mejorará por sí solo durante un período de tiempo. También puede probar ejercicios como la maniobra de Epley y otros remedios caseros para aliviarse.
Consulte a su médico antes de probar estos remedios ya que los casos individuales pueden variar. Además, algunos casos pueden requerir tratamiento por un especialista o incluso cirugía.
Remedios caseros para el vértigo.
Maniobra de Epley
La maniobra de Epley puede ser muy beneficiosa para tratar el vértigo, especialmente el vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB), sin efectos adversos graves.
Las investigaciones han descubierto que este procedimiento puede ayudar a resolver el VPPB de manera efectiva y rápida.
- Siéntate en una cama y coloca una almohada detrás de ti para que quede debajo de tus hombros cuando te acuestes.
- Si su vértigo está en la oreja izquierda, gire la cabeza 45 grados hacia la izquierda. (Si está en el oído derecho, gire la cabeza 45 grados hacia la derecha y siga el resto del procedimiento en consecuencia).
- Rápidamente recuéstese con los hombros sobre la almohada y la cabeza recostada sobre la cama durante aproximadamente 30 segundos.
- A continuación, sin levantar la cabeza, gírela 90 grados hacia la derecha y espere otros 30 segundos.
- Ahora, mientras mantiene su cabeza en su posición actual, gire rápidamente todo su cuerpo 90 grados hacia la derecha y permanezca en esta posición durante 30 segundos.
- Lentamente siéntate, llevando tu cabeza al centro.
- Repita este procedimiento tres veces al día hasta que esté sin vértigo durante al menos 24 horas. En la mayoría de los casos, los síntomas desaparecen en una semana. Lo mejor es realizar los tres ciclos de esta maniobra por la noche antes de ir a dormir en lugar de hacerlo por la mañana o al mediodía.
Vea el siguiente video para ver el procedimiento demostrado.
Jengibre
El jengibre puede ayudar a lidiar con el vértigo porque promueve la circulación sanguínea hacia el cerebro y también alivia las náuseas.
Simplemente masticar un pedazo de jengibre regularmente puede ayudar a aliviar este problema.
Prepare el té de jengibre echando una cucharadita de jengibre rallado en una taza de agua hirviendo durante unos cinco minutos y luego cuele. Puedes endulzarlo con miel. Tómelo dos veces al día durante algunas semanas.
Otra opción es tomar jengibre en forma de suplemento (consulte a su médico para la dosis adecuada).
Nota: hable con su médico antes de tomar jengibre ya que puede interferir con ciertos medicamentos como anti-coagulantes, antidiabéticos y medicamentos para la presión arterial.
Ginkgo Biloba
Ginkgo biloba es una maravillosa medicina tradicional china que ayuda a aumentar el flujo de sangre al cerebro, lo que reduce la sensación de vértigo.
Tome de 120 a 160 mg de extracto de ginkgo biloba en dos o tres dosis divididas por día durante tres meses. Comenzará a notar mejoría después de ocho a 12 semanas.
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